lunes, 28 de mayo de 2012

Intento por dormir.

Aquella noche supe que no podría dormir, supe que sería una larga noche en la que mis pensamientos no me dejarían cerrar los ojos sin recordarle a el. Aquella noche supe que el se adueñaría de mi sueño, de cada parte de mi. Él se adentró en lo más profundo de mi mente, dió vueltas por cada recoveco de mi cerebro. Aquella conversación en la que me dijiste que te habías levantado con ganas de contarle tus tonterías a una persona, y que esa persona era yo... Tenías a miles de personas y decidiste que la única persona a la que querías contarle tus cosas, lo que habías soñado y todo lo que pasaba por tu cabeza era yo. Intenté dormir, pero el brillo de mi sonrisa me deslumbraba y no me dejaba dormir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario