Este es tu mundo.

Hay momentos en la vida en los que desearías desaparecer, iniciar una nueva vida en un sitio diferente, alejada de todo lo que has vivido hasta ahora. Empezar de cero. Piensas que no perteneces a este lugar, que nada pasaría si tú te fueses. Lo hablas con esa persona por la que serías capaz de dejarlo todo, de cambiar tu vida por completo, y su única respuesta es "no es tan fácil desaparecer, tú perteneces a Boadilla, a mi lado". En ese momento tu corazón da un vuelco, y sientes que esas palabras no te dejan de apretar en el estómago. Reconocelo, tu mundo está donde él está.

Te acuerdas de mi.

Día tras día me pregunto si guardarás nuestros recuerdos, si pensarás en mi, si me recordaras como aquello que solíamos ser. Tal vez nunca llegue a conocer las respuestas a esas preguntas, pero me conformo con que en un instante hayas pensado en mi y hayas iniciado esa conversación diaria que tenemos. Tal vez solo dure cinco minutos, tal vez no acabe como desearíamos, pero se que por un momento te habrás acordado de mi y habrás sentido la necesidad de hablarme.

Motivación por lo imposible.

A veces ponerte a escribir parece demasiado fácil, pero a la hora de la verdad, tienes suerte si te salen dos frases seguidas. Realmente es muy difícil escribir lo que sientes, es muy difícil expresar eso con palabras, e incluso diría que imposible, pero nada te puede motivar más que te digan que algo es imposible y no podrás hacerlo. Así que aquí estoy, escribiéndote una vez mas. Otro mes más se acaba y aquí sigo yo, escribiendo, desahogándome, dejando que las palabras hablen por mi, dejando escritos mis sentimientos, mis emociones, todo lo que hay dentro de mi.

Alguien especial.

Despiertas y no hay nada, ninguna llamada, ningún mensaje, ningún detalle para ti y te pasarás el día en pijama, en el ordenador o mirando la televisión porque sólo estás tú, sólo te tienes a ti misma hasta que llegue alguien que convierta tus mañanas en algo por lo que sonreír. Te arreglarás y te pondras guapa sólo para esa persona y saldrás por la calle agarrada de su mano.

Una vez más.

http://www.youtube.com/watch?v=djUVdCBD1IY

Nadie como tú.

La única razón que tengo para seguir luchando eres tú. Nadie me da lo que tú me das, NADIE. Por más que lo intenten nadie jamás podrá llegar a entender lo que me haces sentir con una puta mirada. Algo tan pequeño me llena por dentro... Y es que eres lo más bonito que tengo y tendré jamás.

Sensaciones.

Esa sensación cuando de pronto estás de puta madre y a los cinco minutos estas de puta pena. Esa sensación de ser bipolar a cada instante que pasa, de tener varias personalidades que luchan por salir de dentro de mi. Una para darte una ostia y otra para besarte y no soltarte jamás. Es la sensación de estar enamorado.

Destino.

Vivir mi propio mundo, sin que nadie se interponga en tus metas, sin que nadie te arrebate tus sueños. Vivir ajena a los problemas, ajena a las personas que te amargan la vida, ajena al sufrimiento. Así es como deberíamos vivir todos, vivir NUESTRA vida, no la que cuatro gilipollas se empeñan en que vivamos. Nosotros somos los dueños de nuestro destino, nadie puede tomar decisiones por ti, tú eres quien decide como cuando y donde ir. El destino está en nuestras manos, no en las de nuestros padres, nuestros amigos ni nuestros parientes más cercanos, esta en las nuestras, porque para algo es nuestro destino.

Cambié.

Nunca pensé que llegaría la persona que me hiciese volver a creer en el amor, volver a sentir esa ilusión por la vida, por la felicidad. Nunca pensé que pudiese volver a haber alguien que me hiciese sentir especial con tan solo una mirada. Él ha cambiado todo mi mundo, ha cambiado mis expectativas, mi forma de ver la vida, mi forma de pensar, hasta la forma de ser yo misma. Él me ha hecho diferente, y aun sigo preguntándome cómo ha conseguido eso en apenas 2 meses, como consiguió convertirse en mi todo en esos dos meses. Ha pasado ya un año y aun sigo esperando algo que me ayude a aclarar cómo ocurrió todo esto.

¿Arriesgar?

Siempre me han dicho que arriesgase por lo que quería, que el no lo tenía, que solo podía arriesgarme al si. Tienen razón, lo único que tienes es el no y puedes conseguir el sí, pero también puedes perderlo todo, puedes perder lo que tenías asegurado, esa amistad que os unía. Si nada más que sois conocidos, adelante, arriesgate. Pero si sois muy amigos, ¿Qué haces? ¿Te arriesgas a perder a esa persona? Esas preguntas siempre me han recorrido la mente, día a día me pregunto qué habría pasado si me hubiese callado como una cobarde, si no te hubieses enterado de nada por esas tercera personas.

Me cambiaste.

Sé que tengo mis límites, sé que tarde o temprano me cansaré de ser la gilipollas de siempre que está ahí solo cuando a ti te interesa. Me acabaré cansando, lo sé, pero me estoy sorprendiendo a mi misma aguantando junto a ti tanto tiempo a pesar de todo lo que ha pasado. Me has cambiado demasiado... Y aún no entiendo por qué.

Forgetting.

Trying not to think about you it's quite hard when everyone around you is constantly remembering you about it. Forgetting it's not that difficult. What makes it difficult is the people talking about it all the time, making you reproduce all that scenes, all that memories.

Cero sentidos.

Uno a uno, los días que estuve contigo me vienen a la mente. Esa sensación es tan extraña que te hace estremecerte por dentro. Tristeza y alegría al mismo tiempo, que contrariedad, ¿No? Es como llorar de felicidad, luchar por la paz, encerrarte por pedir la libertad. No tiene sentido pero, ¿Acaso esta vida alguna vez tiene un sentido?

Recuerdos enfrascados.

Busca en tu interior, recoge esos recuerdos que creamos juntos, reunelos en un frasco. Una vez reunidos cierra ese frasco, tiralo al suelo. Si al impactar con el suelo, no se rompe en pedazos es porque el destino quiere que vuelvas a vivir esos recuerdos, no quiere que se rompan.

No pude.

Me miras y sonríes, me haces sentir agusto, haces que sienta que nada cambió, que todo sigue como antes. Tú y yo, con la amistad que nos caracterizaba, con aquella complicidad que tanto nos unió. ¿Qué fue de aquellos tiempos? ¿Olvidaste aquellos momentos alguna vez? Yo jamás pude lograrlo, intente olvidarte, intente dejar de pensar en ti como algo más que amigos, pero nada consiguió sacarte de mi mente.

No entiendo.

Cuando mientes me duele, cuando me dices que no sabes por qué acabó esto me duele. Sé perfectamente que el motivo por el que te alejaste fue porque Juan era más importante para ti que yo, y lo asumí, pero lo que no entiendo es por qué me dijiste que mi confesión no tuvo nada que ver cuando ambos sabemos que si lo hizo. Realmente no lo entiendo.

Confianza.

Después de todo lo que pasó la confianza se pierde. Nunca deje de confiar en ti, pero las cosas eran distintas, ya no te contaba todo como antes. Mi confianza en ti disminuyo, pero día tras día me doy cuenta de que tú jamás dejaste de confiar en mi. Eso es lo que más dudas me da. Si nunca dejaste de confiar en mi, ¿Por qué desapareciste sin dar ni una sola razón? No lo entiendo, y probablemente jamás llegue a entenderlo.

La diferencia.

La diferencia entre ellos y yo es que yo si que daría lo que fuera por verte, ellos solo van si va gente. Yo quise irme sola, aguantando el viaje. A  ellos no les importa no ir, la que está jodida soy yo. Ellos no demuestran una mierda que les importes, y al parecer yo tampoco... Llevo intentando verte 4 días, pero parece que eso se olvida, solo cuenta que no lo he conseguido. Si hubiese podido ir, llevaría ahí desde el primer día, y no me habría apartado de ti, porque eres de esas personas de las que nunca me cansaría de estar a tu lado. Pero aun así me toca joderme y aguantar, y ¿Sabes por qué? Por ti, porque me lo pediste, me pediste que dejase a un lado las broncas, y lo hice, lo hice por ti, porque quería pasar un rato contigo, porque no puedo aguantar un puto mes sin verte. Pero creo que eso ahora mismo importa bien poco.

Toca joderme.

Preocuparme por ti como el primer día, querer saber si estás bien, necesitar tener noticias tuyas para saber que no te ha pasado nada. Probablemente si no me hubiesen dicho nada ni me habría enterado, pero lo hicieron, me lo dijeron, intenté contactar contigo pero nada, tu no dabas señales de vida. Y ahora ¿Qué hago? Joderme, aguantar sin saber si estás bien o no, porque siempre es lo mismo, siempre acabo jodiéndome por culpa de la gente.

Karma.

Vivir es compartir, siendo egoísta no podemos ser felices, el karma siempre acabará jugando en nuestra contra. Si quieres que la vida te sonría tienes que sonreírle tu primer. Al fin y al cabo la vida es como un espejo, si la miras con cara de enfado será el enfado lo que juegue a tu lado, pero si al sonríes, tendras una vida llena de sonrisas. De lo que se da se siembre, no lo olvides.

Me quiere.

Porque él es tonto, muy tonto, y lo admito. Le encanta picarme, y hacerme de rabiar, le encanta ver mis caras de enfado, y ver como no aguanto estar enfadada con él sin que se me escape la risa. Siempre encuentra su peculiar manera de hacerme reír, por muy enfadada que esté. Sé que le encanta llamarme salida, y recordarme que necesito un buen polvo, pero sabe perfectamente que mi locura llega a niveles que ni yo misma conozco. Él consigue hacerme llorar de la risa casi a diario, a pesar de que no sea su intención, y aunque a veces se piense que me rio de él sabe que le quiero muchísimo, y él a mi también me quiere un poquito.

Canciones

Aquellos conciertos que nos montabamos en cada conversación, aquella recopilación de Disney, en la que recordamos nuestra infancia. Creo que repasamos todas y cada una de las películas que marcaron nuestra infancia. Aquellas canciones de Marvin que tanto me obligaste a escuchar. Aquelllas canciones que me hiciste escuchar ese quince de Septiembre en tu casa mientras haciamos de chachas lavando los platos. Todas y cada una de ellas me hiciste escuchar, y una vez más hiciste que me gustasen, e hiciste que cada vez que las escuchaba me acordase de ti irremediablemente.

Lo mereces.

Cuando pienses que no sirves para nada y que no mereces nada de lo que tienes piensa en mi. Sirves para hacerme sonreír día a día, para hacerme mi vida más amena, para hacerme feliz. Te mereces todo y más, porque eres alguien increíble que da lo mejor de si mismo para hacer feliz a los demás. Está ahí cuando le necesitan y cuando no también. Te mereces lo mejor por el simple hecho de hacerme feliz cada día.

Fantasía.

Tú y yo juntos, abrazados, nadie al rededor. Es el sueño perfecto. Me miras a los ojos, tu mirada me fulmina, me atraviesa como si de un rayo se tratase. Haces que me estremezca y un escalofrío recorra mi cuerpo. Me besas la frente y me miras a los ojos sin decir nada. Miras mi boca y acaricias mis labios con tus dedos, y repites esta agradable sensación por mi cuello. Me agarras la cabeza inclinandome hacia atrás quedando nuestros labios a escasos centimetros. No aguanto más, rompo esa distancia y beso tus labios. Nos separamos y nos quedamos mirandonos a los ojos mutuamente durante un largo instante. De pronto me sonríes, y me devuelves el beso.

Agradecimientos.

Tú y tu estúpida manía de dar las gracias cuando te sigo debiendo tantísimo. ¿Qué es exáctamente lo que me agradeces? ¿Estar ahí cuando necesitas un amigo, escucharte cuando quieres desahogarte, intentar sacarte una de las miles sonrisas que he visto en tu cara? El día que consiga agradecerte todo lo que hiciste tú por mi , entonces te dejaré que me des las gracias, hasta entonces lo siento pero no acepto agradecimientos innecesarios.

Copias.

La calidad de las cosas es lo que marca la diferencia. Que seas diferente es lo que me atrae a ti, que no seas como el resto, que tu personalidad sea tan... especial. Busco entre la gente, alguien que sea como tú, que no le importe destacar por ser distinto, que no intente hacer lo que el resto. No me gustan los imitadores, me gusta que sean tal y como son.

Corchos y recuerdos.

Nada más despertar miro las paredes, llenas de recuerdos y motivos para sonreír, miro ese corcho en el que tanta gente dejó huella. Tú no estás en ese corcho, no necesito tenerte en un estúpido corcho para recordarte, símplemente necesito cerrar los ojos y ahí te veo, junto a mi, sonriéndome, y haciéndome feliz una vez más. Hay cosas que no es necesario tener delante para recordarlas con total claridad, y tú eres una de esas cosas, algo de lo que por más que lo intente jamás podré olvidarme.

Preguntas y respuestas.

Preguntas tan difíciles que no tienen respuesta, respuestas tan sencillas que no hay preguntas para ellas. Hay preguntas que son muy fáciles de responder, pero nunca se obtienen las respuestas que esperamos. Nunca obtenemos lo que tanto ansiamos saber, por muy sencillo que sea averiguarlo no es lo mismo que si esa persona te lo dice, ¿Verdad?

Fue especial.

Otro día más me doy cuenta de que fui importante para ti, otro día más me demuestras que para ti no fui otra simple amiga. Creía que la única que recordaba cada una de nuestras conversaciones era yo, pero una vez más me demuestras que estaba equivocada. Te acordaste del día en que más te necesité, te acordaste de nuestra conversación, y de las tonterías que me dijiste para que dejase de llorar y sonriese a tu lado como siempre. Un día más me doy cuenta de que esto fue especial, y no solo fueron imaginaciones mías.

Palabras.

Hay gente que no toma constancia del efecto que tienen sus palabras sobre los demás, hay gente que no se da cuenta del caño que pueden hacer con una mísera palabra. Las palabras se las lleva el viento, si, pero el viento no se puede llevar lo que las palabras crean en ti, hay palabras que quedarán en tu mente por siempre.

Mentiras.

Nunca me gustaron las mentiras, siempre me pareció un truco muy barato para esconder quien eres en realidad. Si hay algo que de verdad odie en la vida es eso, que me mientan. Si hay algo tan malo que hayas hecho, que tengas que ocultarlo.... Si has tenido los huevos de hacerlo, ten también los huevos de reconocerlo y dar la cara. No te ocultes tras una cobarde máscara, la verdad siempre acaba saliendo a la luz, y resulta muchísimo peor que si la hubieses dicho desde un primer momento.